Era yo una chicuela- alguna vez lo fui, no siempre estuve asi- cuando me tocó vivir, ver en la tv y oir sobre Juanito Kennedy, no entendia mucho, pero me quedó una imagen inolvidable de ver a tanta gente emocionada con ese joven presidente, la esperanza pintada en millones de caras de muchos colores, razas, ciudades y un mundo atento como nunca. No quiero recordar su muerte, pero también se me quedó grabado hasta en el último rincón de mi subconciente. Años después, volví a vivir y ver, ahora con más entendimiento, la toma de protesta del primer presidente de color en el país de la supuesta libertad, un país moribundo, en guerra y crisis. Recuerdo la película Impacto Profundo y al que le tocó la bronca era un presidente precisamente de color.Veamos:
Un astrónomo adolescente y su maestro, descubren un objeto en el cielo nocturno. Poco sabían de que era un cometa en curso de coalisión con la Tierra. El maestro muere en un accidente automovilístico, cuando se dirigía a reportar su descubrimiento. Simultáneamente, el presidente de los Estados Unidos anuncia la existencia del cometa, asegurando a la población que no hay necesidad de entrar en pánico, ya que la Nasa, enviará al espacio la expedicón Messiah, compuesta por un grupo de astronautas y expertos, para destruir el cometa antes de que colisione con la Tierra. Ante la eventualidad de que la misión Messiah falle, se han construído cuevas gigantescas en lo profundo de la tierra, donde serán alojadas 800.000 personas seleccionadas al azar que convivirán con 200.000 científicos y profesionales, para salvar a la humanidad de la extinción.
La película en si es medio mediocre, pero Morgan Freeman, un actorazo de color, es el presidente que le tocará la bronca de salvar al mundo o de acabarlo, al fin que si hay que echarle la culpa a alguien, que sea al negro. ¡Hágame ud. el favor!
El punto aquí, con éste nuevo presidente no es sólo el rompimiento de muchas obsoletas tradiciones, no es sólo que una persona de color ocupe al cargo más alto y que mande a Jorgito al psicólogo a que le explique el pésimo papel que hizo en su afán de sed de sange petrolera, sino qué pasará realmente, sabemos su programa, sus planes, la carta a sus hijas, su origen, la bailada que se aventó con Beyoncé, bueno con su esposa Michelle, los conciertos musicales con un frío de hipotermia y una Shakira que en lo personal, me decepcionó, ya que salió a cantar como una guera más, dejó lo latino en la sala de belleza, lástima. Volviendo al tema, el quid aquí, es: ¿lo dejarán ser? ¿cumplirá realmente? ojalá...si yo pudiera votar allá, lo hubiera hecho por Obama. Nos queda entonces el beneficio de la duda, más la deuda que estamos pagando todos por el efecto dominó del país vecino. Mucha suerte Obama.
