Mi amiga Ely acaba de regresar de Mongolia, fue junto con su padre Don Manuel a recibir un reconocimiento como poetas. A mi la poesía no me sale, cuando mucho esa de "Mami querida madre adorada, llévame al cine y tu pagas la entrada" es lo máximo. Por eso admiro a los poetas, Neruda y sus tristes noches azules, Rosario Castellanos, Gibran, Machado y muchos más que me encanta como escriben. Pero lo importante en este escrito, es decirles que me trajo varios regalos, para empezar una muñeca tipica de allá (me fascina coleccionar muñecas) y un bolsa mágica, donde pones dentro tus deseos como ofrenda para que no te falte comida, dinero, salud y amor, lo clasico pero en esta ocasión, la peticion es a Buda. Para adecuarlo al país, horario y época del año, mejor a San Judas Tadeo. El que una persona viaje tan lejos y te traiga objetos llenos de amor y buenos deseos es increible. Así que recibí los regalos mongoleses con el corazón abierto, lastima que el chamán que purifico la bolsita no tuve el gusto de conocerlo, pero la intencion basta y sobra, gracias Ely.
1 comentario:
¡Qué envidia! (Tanto el viaje como los regalos) ¡Felicidades!
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