jueves, septiembre 27, 2007

El círculo.


Por más vueltas que le demos, la vida es un círculo. Tiene que abrirse y cerrarse algún día, por mucho que lo alarguemos, debemos hacerlo para de esta forma, poder abrir otros. Damos vueltas en círculo buscando el amor, lo encontramos, renunciamos a él, buscamos y ganamos, encontramos y perdemos. Qué difícil es cerrar un círculo cuyas grecas nos hieren el alma, nos sangran las ideas, los pensamientos y nos destruyen mortalmente los sentimientos. La gente nos llena de círculos, cuando nacemos, cuando nos casamos, cuando nos morimos. Vamos y venimos por la ruta llamada mundo, bajamos, subimos, nos elevamos o nos estrellamos de vez en cuando. Los pies, se llenan del peso de la decepción, de la angustia, de los por qué que jamás sabremos...nos llenan los alfareros de mensajes positivos, de palabras de ánimo, de fortaleza, pero la cama queda vacía igual, los sueños se rompieron sin importarle al poseedor del martillo tenaz, las ilusiones cegadas de no ver al verdadero ser que porta el lastimoso adiós sin miramientos, sin memoria de lo bueno, sólo con el ímpetu de la carne nueva que lo enciende sin saber que algún día y esta escrito en el libro de los círculos, se voltea a buscar la figura destrozada por el tiempo, desolada por el desamor de su fría mirada, sus promesas falsas y encuentra el círculo cerrado, fundido de nuevo con baños de dolor color oro puro, más fuerte o más débil...quien sabe...sólo el tiempo, lo dirá...amores a destiempos cómo destruyen los círculos, las promesas en el altar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cierto. El universo mismo es un circulo y por consiguiente infinito. Todo en esta vida es un ciclo. No hay principio, no hay fin.